Un oficial de seguridad le da una lección de obediencia a los ladrones adolescentes

Se abre la escena con un oficial de seguridad, vestido con un traje negro crujiente, de pie frente a un grupo de jóvenes.Encuesta a la multitud con una mirada seria en la cara, dispuesto a tomar medidas contra cualquier posible delincuente.Al escanear a la multitud, ve a dos jóvenes, ambas con miradas sombrías en sus ojos, que están tratando de colar algunos artículos fuera de la tienda.De inmediato, comienza a interrogarlas, haciéndoles preguntas sobre sus motivos para robar.Las mujeres responden con desafío, alegando que no tuvieron más remedio que robar los artículos.El oficial de seguridad no lo está comprando, y exige saber dónde han ocultado los bienes robados. Las mujeres se niegan a contestar, y el oficial de seguridad se queda sin más remedio que castigarlas.Les ordena arrodillarse en el suelo y abrirse bien de piernas.Luego procede a azotarles las tetas con un látigo de cuero, dejándolas rojas y crudas.Las mujeres gimen y se retuercen de dolor, pero el oficial deseguridad no muestra piedad, sin dejar de castigarles por sus delitos.La escena se traslada a un lugar al aire libre, donde el agente de seguridad toma el control de la situación.Ordena a las mujeres que se desnuden a su ropa interior y se pongan en línea, donde luego procede a entrevistarlas. Las mujeres son sometidas a una variedad de tareas humillantes, entre ellas el hecho de ser hechas pararse de una pierna y besar una foto del oficial de seguridad.La seguridad.